La página web El rincón de la novela romántica, me ha hecho esta entrevista con motivo de la publicación de Decisiones arriesgadas. Desde aquí les envío un abrazo enorme, ha sido un placer contestar a vuestras preguntas chicas.
Hola Mar, antes de nada queremos darte las gracias por concedernos esta entrevista. Estamos encantadas de poder hablar contigo.
Yo también estoy encantada de poder hablar con vosotras. Las gracias son mutuas.
Decisiones arriesgadas es tu segunda novela, la cual estamos deseando leer porque Bajo el cielo de Montana nos gustó mucho. ¿Qué retos te ha supuesto escribir esta nueva historia?
Pues la verdad es que ha supuesto mi mayor reto hasta la fecha. Escribir una novela de suspense con todos los ingredientes típicos de este género, es bastante más complicado de lo que yo pensaba cuando inicié este proyecto hace algo más de dos años. Enseguida me di cuenta de que elaborar una trama policíaca que resultara creíble y coherente, con todos los personajes que había introducido y con todas las variables que se iban abriendo, requería de un esfuerzo doble por mi parte, así que decidí tomármelo con calma porque escribir esta novela no iba a ser como coser y cantar. Y no lo fue. Por una parte estaba completamente absorbida por esta historia, enganchada hasta la médula a sus protagonistas y al argumento, y por otro lado había momentos en los que tenía ganas de gritar y de dedicarme a otra cosa más sencilla que no me exigiera tanto. Menos mal que esto último nunca fue una opción real para mí, sino que se convirtió en lo que decíamos al principio, en un reto: o la novela o yo, jajaja. Llegué a contar hasta ocho revisiones distintas en diferentes momentos del tiempo con sus correspondientes cambios de diálogos, de descripciones, de giros argumentales… una locura. ¿Pero sabéis qué es lo mejor de haber afrontado este reto? La enorme satisfacción que ahora siento de ver la novela terminada, a mi gusto, y a punto de ser publicada. No sé cómo la acogerá la gente, si gustará o no gustará, pero yo me siento orgullosísima de ella y haber conseguido escribirla ya es un premio para mí. Si además gusta, entonces me sentiré muy afortunada.
¿Qué cambios o diferencias notas en ti como escritora, desde que publicaste Bajo el cielo de Montana hasta ahora?
Ufff, muchísimos. Ya han trascurrido dos años desde que se publicó Bajo el cielo de Montana, y en todo este tiempo siento que he crecido mucho como escritora y que he mejorado considerablemente en todos los niveles. Ahora soy más cuidadosa con cada palabra que escribo y he aprendido más recursos lingüísticos y literarios. Soy más exigente conmigo misma, y soy capaz de escribir una escena cien veces si hace falta con tal de que quede perfecta. Cuando mi editora leyó Decisiones arriesgadas por primera vez, me comentó que había madurado mucho desde mi primera novela, y es que no hay nada más estimulante a la hora de esforzarse en aprender, que el hecho de saber que luego van a leerte. Yo como lectora exijo un mínimo de calidad, y eso es también lo que yo intento ofrecer con mis novelas.
¿Qué nos vamos a encontrar tus lectoras en Decisiones arriesgadas?
Pues encontraréis una novela llena de misterio, de tramas paralelas, de malos y de buenos, de personajes sólidos y, por supuesto, de mucho amor con alguna que otra dosis de sexo. Así tengo contentas a las que les gustan las novelas de suspense, a las que les gustan las novelas eróticas y a las que les gustan las novelas de amor sin más artificios, jaja.
Sabemos que esta pregunta te la habremos hecho mil veces, pero quizá has cambiado de opinión con el paso del tiempo ¿Has pensado en escribir otro género de novela romántica que no sea actual? Por ejemplo: histórica o paranormal.
Soy de la opinión que un escritor debe contar aquello sobre lo que tenga algo que decir. Para mí, escribir consiste básicamente en eso, en exteriorizar por medio de palabras todo ese cúmulo de ideas, de sentimientos, de sensaciones que te invaden la cabeza y a los que hay que darles salida de alguna forma. Todo lo que yo necesito contar transcurre dentro de esta época, más allá de eso sólo existe el vacío, por lo que si escribiera una novela paranormal, histórica o erótica, me estaría forzando a mí misma a contar algo sobre lo que no tengo gran cosa que decir. No sé lo que sucederá dentro de cinco años, si habré cambiado de opinión o si las musas me susurrarán al oído historias interesantes que contar sobre otros géneros románticos, está claro que nunca se puede decir “de esta agua no beberé”, pero a fecha de hoy tengo bastante claro que mis historias van a continuar transcurriendo en esta época.
Además, creo que el mercado demanda una mayor publicación de novelas contemporáneas, al menos es lo que me encuentro cuando me paseo por los foros.
¿Qué nos puedes contar de los personajes protagonistas de Decisiones arriesgadas?
Creo que tanto Derek Taylor como Megan Lewis son unos personajes muy sólidos y perfilados. Los he mimado hasta el extremo, y he desarrollado sus personalidades minuciosamente, otorgándoles muchas facetas para que resulten creíbles y las lectoras se puedan ver reflejadas en ellos. Sin desatender el hilo argumental y policial, la fuerza principal de la novela reside en ambos. Derek Taylor es un policía duro, es protector y apasionado, y se desvive por todo aquello en lo que cree y por todo aquello que quiere. Megan Lewis es su complemento ideal, es una mujer fuerte y decidida, amante de su trabajo, pero con algunas taras emocionales que arrastra desde hace muchos años y que todavía no ha resuelto. Creo que hay mucha química entre los dos, y que esa química se palpa desde las primeras páginas.
¿Cuales crees que son tus mejores cualidades como escritora?
Me suelen decir que creo personajes muy atractivos y que ese es mi punto más fuerte. Es posible que tengan razón, porque como lectora me gustan los personajes de este tipo, que estén muy perfilados y que tengan carisma y personalidad, vamos, que cuando termines de leer la novela y cierras la última página, ya les estás echando de menos.
También escribo de forma sencilla, clara y amena, creo que así llego de forma más directa al lector, aunque para ser franca, creo que son las personas que me leen las más indicadas para hablar de cuáles son esas cualidades que ven en mí. Yo intento hacerlo lo mejor que puedo.
¿Estás trabajando ya en tu próxima novela? ¿Nos puedes contar qué ideas tienes para tus próximos proyectos?
Sí, y además está ya muy avanzada. Estoy escribiendo una novela que se titula Senderos y que está algo más en la línea de Bajo el cielo de Montana que de Decisiones arriesgadas, aunque supongo que tiene cosas de las dos. Estoy muy entusiasmada con ella, estoy disfrutando más que nunca de la parte creativa y las cosas están saliendo mejor incluso de lo que yo esperaba. En toda novela llega un punto en el que los personajes tiran hacia un lado mientras tú te empeñas en tirar hacia otro y, por regla general, prefiero que terminen saliéndose con la suya porque lo que ellos deciden hacer suele ser mejor de lo que yo tenía pensado para ellos. Es alucinante, pero es cierto que cuando creas un personaje, muchas veces sientes que tienen vida propia. Con Senderos me está sucediendo esto casi desde el principio, y me está enamorando el resultado. Todavía queda bastante para que vea la luz, pero sí que os puedo adelantar que la publicarán en el último trimestre del año que viene, como Decisiones arriesgadas.
Además, en Senderos hay varios personajes secundarios que piden a gritos su propia historia, en concreto dos, por lo que me temo que de Senderos va a salir una especie de saga.
Nos ha gustado mucho la portada de Decisiones arriesgadas. Creemos que las dos novelas que tienes hasta ahora tienen portadas muy adecuadas. ¿Qué opinas tú? ¿Te han gustado? ¿Las has elegido tú misma?
Estoy completamente de acuerdo con vosotras. Cuando mi editora me envió la portada de Decisiones arriesgadas se me puso una sonrisa en la cara de oreja a oreja. No la he elegido yo, pero os aseguro, que si hubieran puesto delante de mis narices cien portadas distintas, yo hubiera escogido esta sin dudarlo ni un segundo. Me parece preciosa, elegante, sensual… y muy acorde con el título. Es simplemente perfecta.
Tampoco escogí la portada de Bajo el cielo de Montana. Yo quería que fuera un paisaje porque pienso que el título lo pedía a gritos, y mis deseos se hicieron realidad también.
La verdad es que ambas portadas son preciosas y estoy muy orgullosa de ellas y de la labor de la editorial, que parece que me lean el pensamiento.
¿Cómo lleva el día a día una escritora como tú? Trabajo, casa, familia y escribir…
Es exactamente igual que antes, solo que tienes menos tiempo para dedicar a otras cosas. Además de las responsabilidades que mencionáis, yo soy una persona con muchas aficiones, por lo que tengo que arañar el tiempo de donde puedo. Escribo incluso en el trabajo cuando la mañana es tranquila, busco un hueco por las tardes y también los fines de semana. Y lo más bonito es que jamás lo hago por imposición sino por necesidad, porque el cuerpo me lo pide igual que te pide comer o beber.
La verdad es que desde que gané el III certamen de Terciopelo y comencé a escribir de manera más profesional, siento que soy más feliz. He soñado toda mi vida con esto, y todavía tengo que pellizcarme para darme cuenta que no forma parte de un sueño.
Y para finalizar ¿Querrías dedicar unas palabras a tus fans de El Rincón de la novela romántica?
Yo siempre digo que crecí como escritora en el Rincón Romántico (ahora El Rincón de la novela romántica) porque es la pura realidad. En el foro de relatos comencé a colgar mis primeros escritos hace ya cuatro años y gracias a los comentarios maravillosos que dejaban las foreras comencé a tantear la posibilidad de ir más allá y tomármelo más en serio. Mis palabras hacia vosotras y hacia las foreras del Rincón, siempre serán de agradecimiento y de cariño, por lo que mis puertas siempre estarán abiertas para vosotras.
Os envío un fuerte abrazo a todas.
Gracias por todo, Mar. Te deseamos lo mejor con la publicación de Decisiones arriesgadas.
Gracias a vosotras por brindarme esta oportunidad de hablaros de mi novela. Espero que os guste y que la disfrutéis tanto o más de lo que yo he disfrutado escribiéndola.
